Para que al mudarte no te estreses, sigue estos 10 pasos

Antes de estrenar un hogar, es importante poner todo en orden, por ejemplo, la logística, el presupuesto, la limpieza y los últimos detalles.

Sí vas a estrenar casa, es común tener un sentimiento de alegría y emoción por tu nuevo hogar, pero al pensar en la palabra mudanza repasas lo estresante y agotador que puede ser si no planeaste la logística para un cambio de vivienda sencillo, agradable y organizado.

Antes de dar el paso para estrenar un hogar, es importante tomar el tiempo necesario para poner todo en orden, y si no sabes por dónde empezar, esta guía práctica con 10 pasos básicos puede ser muy útil para tener una mudanza sin contratiempos.

1. Contratar el transporte. Revisa las fechas probables para cambiarte de casa, es importante reservar con anticipación, no olvides que la mayoría suele aprovechar los fines de semana para esta actividad. Si planeas con tiempo suficiente, te permitirá comparar presupuestos y elegir el más adaptable a tus necesidades y a tu bolsillo.

Antes de contratar el servicio, revisa que sea un transporte adecuado y con la capacidad necesaria para trasladar tus objetos. Uno de los aspectos básicos que debes considerar es la cantidad de personal, que debe ser suficiente para cargar y acomodar de manera cuidadosa.

2.Asignar un presupuesto. Cambiarte de casa implica una serie de gastos, no sólo el costo de la mudanza, también es necesario considerar el re-direccionamiento de servicios como teléfono e internet, la compra de maletas, cajas, accesorios y/o bolsas para resguardar tus cosas. Reserva un monto para los arreglos de la nueva propiedad y prevé el bolsillo para posibles pagos no planeados.

3. Organización de los muebles y pertenencias que llevarás contigo. Haz una lista a modo de inventario, ordena cajas y bolsas con etiquetas para saber qué hay en cada paquete. Puedes utilizar frases como “frágil” o “ábreme primero”. No te abrumes empacando, guarda las cosas de una habitación a la vez, esto te permitirá hacer limpieza por cada área.

4. Selecciona cuidadosamente. Haz una elección objetiva de las cosas que vas a conservar, define cuáles vas a regalar o vender, si puedes donar algunos artículos o si en definitiva hay algunas que van directo a la basura. Este cambio de domicilio es tu oportunidad para renovar tu lugar para vivir, también tus recuerdos y despojarte de lo inservible.

5. Limpieza de la vivienda que vas a dejar. Calendariza la fecha en que entregarás la casa, de esta forma, tendrás un tiempo limitado para hacer las reparaciones necesarias, limpiar a profundidad y dejarla lista para el siguiente inquilino o para ponerla a la venta si es de tu propiedad.

6. Realizar arreglos en tu nueva casa. Antes de mudarte, adapta el lugar a tus necesidades y gustos. Puedes adelantarte y hacer un check list de los aspectos que requieren mantenimiento, ya sea alguna reparación o si necesita una capa de pintura, asegúrate de realizarlo antes de colocar tus cosas, sin duda, será más fácil hacerlo.

7. Pon atención a los últimos detalles. Es conveniente que antes de mudarte acudas al nuevo domicilio para cerciorarte de que todo esté en orden: si las llaves abren de manera correcta, si contarás con un espacio para la descarga de tus objetos y si los servicios básicos estén funcionando correctamente.

8. Revisar la ruta y planea horarios. Si tendrás ayuda de tus familiares o amigos, lo más oportuno es planear el día, de forma que dispongan de tiempo para comidas y descanso. Otra recomendación de gran utilidad para evitar largos recorridos o congestión por tránsito lento es conocer las rutas alternas que lleven hasta la puerta de tu casa.

9. Marcar e identificar las cajas con documentación importante. Separa y lleva personalmente los documentos como escrituras, contratos de servicios, pasaportes, o actas de nacimiento, y las cosas importantes o de valor para evitar cualquier malentendido, consideran desde Castia, empresa de tecnología financiera e inmobiliaria que permite comprar una propiedad nueva antes de vender la que se habita.

10. Desempaca sin premura. Así como realizaste el empaque, dedica el tiempo necesario al acomodo en cada habitación, primero enfócate en los embalajes con etiquetas de “frágil” o “ábreme primero”, si utilizaste bolsas o marcas de colores para distinguir, puedes acomodar de mayor a menor prioridad.